Hoy paseando por la calle con mis cachorrillos y con mis padres (binomio inseparable ambos por cierto en este momento...)por la calle del centro me he topado con un chaval con el que estuve ya hace tiempo. No hace tanto para mi porque fue de los últimos antes de empezar en toda esta aventura de la maternidad en solitario, pero sí que hace mucho si lo vemos desde el punto de vista temporal, que lo pienso y a mi misma me da vertigo.... El caso de por qué llevo dándole vueltas al haberlo visto es porque ha pasado justo al lado mia, no por la acera de enfrente ni con gente por medio de nosotros, sino justo por mi lado a escaso medio metro, y se ha hecho el tonto y no me ha saludado. Que decepción.
No es que esa persona signifique para mi nada, porque no lo significa desde hace mucho tiempo, y aqui el "mucho" lo es en todos los sentidos, pero la mala educación me ha chocado y me ha dejado muy decepcionada. No esperaba que se parara a saludar sino un simplemente "hola". Y eso me ha hecho pensar en la de gilipollas que han pasado por mi vida. Y que gracias a todos ellos estoy en este punto de mi vida, y ese punto de mi vida significa tener a mi lado a mis dos soles.
Pero a parte de eso, que decepción....... A ver no pasó nada entre esa persona y yo para que me retire la palabra, de hecho me ha saludado siempre hasta que decidió en un momento dado que ya no le apetecía. Y a mi me da pena haber estado con alguien, con quien he compartido cosas y por quien he tenido sentimientos, y que ni siquiera quede el deseo de saludar educadamente por la calle. Y me ha hecho pensar en que igual que él todos, o casi todos, porque creo recordar alguna excepción (que tampoco han sido muchos no vayamos a llamar a engaños), son iguales de gilipollas. A ver... ahi puede ser la culpa mia, cuando se repite el patron hay que preguntarse por qué me he fijado siempre en gilipollas mentales, aunque la verdad no ha habido mucho más por ahí entre los que rebuscar....Y después de leer lo que decía Monica Cruz, con eso de que luego cuando sea madre le será más fácil encontrar una buena pareja porque va a desechar a los impresentables........ yo no creí en su momento que fuera ningún impresentable, y no creo que con hijos se nos vaya a facilitar la cosa. Y no es por ser pesimista. Pero si antes probabamos a ver qué tal, ahora que tenemos otras prioridades no querremos perder el tiempo, daremos menos oportunidades, nos lo van a tener que poner más fácil, y eso, tenemos que ser realistas, no es muy común.
Creo que lo voy a tener más crudo, aunque de verdad, de verdad, que me gustaría que apareciera un "principe azul" que reuna todas las características del hombre perfecto, o imperfecto pero "no gilipollas". No se.....será siempre ya así?? No encontraré a nadie interesante que aunque terminemos me salude por la calle??